Soy una escritora-soñadora. A veces sueño escribiendo y otras escribo soñando. Me gustan los finales inesperados y los capuccinos dulces.
Escribo porque soy buena escribir. Algunos son buenos para amanecer sin cruda o para stalkear a sus ex novios. Y yo, yo soy buena para escribir. Más bien, creo que soy buena para querer escribir, que no es lo mismo, pero con eso me basta por ahora.